Benicàssim es un destino seguro. Y lo digo convencida y con conocimiento de causa. El esfuerzo de nuestros hosteleros, hoteleros y vecinos en general por garantizar las medidas sanitarias y de distanciamiento social así lo demuestra. Por esta razón, mis primeras líneas quiero que sean para ellos. Para agradecerles su esfuerzo y reconocer el trabajo y la ilusión que le ponen a diario, pese a ser tiempos difíciles.

Ellos son los verdaderos artífices para que Benicàssim sea referencia turística año tras año y este verano con más motivo. Pero para que esta nueva normalidad funcione y no se convierta en un problema debemos remar unidos. Y eso significa no propagar bulos. Hoy en día, con la preocupación y el miedo lógico y existente, un simple whatsapp o tuit puede arruinar un negocio, cancelar reservas o borrar a Benicàssim del mapa. En definitiva, puede dañar la imagen de la ciudad y por ende, perjudicar a la economía local. No caigamos pues en el error de lanzarnos piedras contra nuestro propio tejado porque lo podemos pagar muy caro. Evidentemente, el virus no se ha esfumado, sigue muy presente en la calle y toda precaución y prudencia es poca para afrontarlo.

Combatir el virus es cosa de todos. Porque luchar contra el mismo parte de la responsabilidad individual, a la hora de llevar la mascarilla y cumplir con las medidas sanitarias, sin embargo el infringir la normativa y mentir u ocultar información, puede acabar afectando al conjunto de la sociedad. Desde el Ayuntamiento también estamos poniendo todo de nuestra parte para que Benicàssim continúe siendo lo de siempre: el destino preferido y la segunda casa de turistas nacionales e internacionales.

Desde la Concejalía de Turismo en particular hemos organizado un nuevo proyecto Benicàssim Inspira que conjugará salud, relax, bienestar y sostenibilidad para delicia de visitantes y vecinos.

La iniciativa enmarcada dentro de la marca Benicàssim, Destino Turístico Saludable aúna experiencias healthy —como senderismo o rutas cicloturistas— y otras vinculadas al bienestar más relajante, como programas a la carta de envejecimiento activo, cuerpo y mente, antiestrés y de conexión con la naturaleza. Todo ello, maridado con una oferta gastronómica slow food basada en menús saludables a base de productos locales y de proximidad para degustar de forma sana los sabores de nuestra localidad.

En el contexto actual estas premisas son fundamentales a la hora de elegir destino y este programa de actividades es solo el pistoletazo de salida de una oferta pensada para recuperar y dinamizar el sector. Cabe destacar que ya en FITUR fuimos pioneros en buscar este tipo de turismo: de bienestar, salud, calidad de vida y descanso.

Además, para reactivar Benicàssim y el turismo contamos con un paquete de ayudas para pymes y autónomos destinadas a la compensación por los efectos del covid-19 en cuanto al arrendamiento o hipoteca del local, gastos de suministros y desinfección y gastos en función de los empleados a cargo. Hagamos del fracaso una oportunidad y de la cautela, la unión y el trabajo duro la mejor medicina.

*Portavoz de Ciudadanos en la Diputación Provincial y teniente alcaldesa de Benicàssim