Adía de hoy dicen que es necesario blindar la sanidad pública quienes la privatizaron durante 20 años. Esta semana estamos inmersos en el debate de política general de la Comunidad Valenciana en les Corts y lo hacemos en medio de una pandemia que nos ha llevado a una crisis social y económica, lo cual hace que todo los discursos se basen en la salida de la crisis, en todos los ámbitos, especialmente el sanitario. El lunes el presidente Puig hizo un diagnóstico de las medidas para parar la pandemia, además de una valoración de los cinco años de políticas botánicas, que nos han ayudado a fortalecer las políticas sociales en nuestra autonomía además de hacer frente a la pandemia. Todo ello ha de traducirse en unos presupuestos que continúen salvando personas, que sirvan para robustecer los servicios públicos y recuperar los que fueron vendidos años atrás.

Nuestra aportación al debate, como Unides Podem, grupo parlamentario al que represento como portavoz en sanidad, se centra en primer término en continuar blindando y defendiendo la sanidad pública, recuperar los servicios públicos privatizados, acabar con las concesiones de los departamentos de salud y en segundo término, promover la salud mental desarrollando un plan valenciano para la prevención de las patologías mentales que puedan haberse intensificado o creado a raíz de la pandemia del covid-19. Esto unido a las propuestas botánicas en el mismo ámbito, de las cuales quiero destacar la elaboración de forma de coordinada de un plan estratégico de atención primaria que reconozca y potencie su papel como elemento asistencial básico y eje vertebrador de todo nuestro sistema.

La hoja de ruta del Botànic no ha variado, sigue su curso y desde Unides Podem confiamos plenamente en que las reversiones de los servicios de salud y de los departamento de salud se van a llevar a cabo siguiendo esa hoja de ruta que además se ha fortalecido con el pacto de reconstrucción firmado en agosto por cinco de las seis fuerzas políticas en el parlamento valenciano.

En contrapartida a nuestras aportaciones tenemos las de los grupos de la oposición, de las cuales quisiera señalar alguna significativa por contradictoria a lo que consensuamos en agosto. El PP propone paralizar las reversiones de concesiones sanitarias de los hospitales que funcionan y Ciudadanos propone estudiar todas las herramientas que ofrece la colaboración público-privada en el ámbito sanitario y además prorrogar la concesión del departamento de salud de Torrevieja en aras de la máxima calidad asistencial.

Propuestas contradictorias porque lo que firmamos en el Pacto de reconstrucción consistía en una clara apuesta por las reversiones sanitarias con la única finalidad de hacer una sociedad más justa, más igualitaria y que no genere diversos niveles de ciudadanía. Pero es una pena que ese consenso ficticio de agosto se tumbe ahora con las propuestas tan distanciadas de polo a polo, que nos presentan los dos partidos de la oposición, como muestra de una clara traición a los valencianos y valencianas.

Lo dijo la síndica de Unides Podem el pasado lunes, «no hay alternativa al Botànic porque el Botànic es el camino». Y el camino ahora es blindar la sanidad pública que cuide y sane a todas sin distinción. H

*Diputada de Unides Podem por Castellón en les Corts