Esta semana hemos asistido a una comedia representada por Pedro Sánchez en la que se ha demostrado que su único interés, en lugar de articular una mayoría suficiente, ha sido defender en exclusiva sus intereses particulares de forma sectaria y excluyente.

En cambio, el Partido Popular estamos en contra de los cordones sanitarios ya que nuestro objetivo siempre ha sido no dividir a la gente y siempre hemos querido gobernar para todos y defender los derechos e intereses legítimos de todos los españoles.

La razón fundamental para negarle nuestra confianza a la investidura es el eje central de su programa de Gobierno, que no es otro que una contrarreforma de la política económica y social de la última legislatura. Apoyar a Sánchez es volver al desastre al que habían abocado a España hasta el 2011.

Es volver al aumento del paro, a la destrucción, al riesgo de intervención... El fondo de todo lo que Sánchez y Rivera defendieron en el Congreso fue un bluf. Algo emborronado y desdibujado por manchas de tintas con color de ambición. Sánchez solo hilvanó ocurrencias y admitió que ha usado los mecanismos constitucionales de investidura como una plataforma personal.

En el otro lado, desde el PP seguiremos apostando por defender los intereses generales de todos los españoles. H

*Senadora del PP