Antonio Machado ilustró a España con la serenidad de unos versos que hoy forman parte de nuestro patrimonio. «Hablaba en verso y vivía en poesía», decía Gerardo Diego. Hoy somos herederos de la genialidad y claridad de un poeta de cuya mano seguimos caminando, mirando hacia adelante.

En mi caso lo hice por Burriana. Saltando las acequias, recorriendo en bici los caminos que hoy alimentan un tesoro que, como el de Machado, hemos seguido reivindicando. Arterias económicas que hoy están degradadas. No hay camino que no requiera de una inversión mínima para garantizar que la riqueza que nos vio crecer sigue prosperando.

Los huertos de naranjas entre los que crecimos siguen hoy acompañando al caminante. Al citricultor que cada mañana se levanta sin que el sol haya hecho acto de presencia por el horizonte para cultivar una riqueza que vive sometida a continuas amenazas.

Este lunes reivindicamos esa fortaleza que forma parte de nuestra identidad. El sacrifico, el sudor, el esfuerzo infinito que es símbolo de riqueza para Burriana.

Desde la unión que nos fortalece, merecemos que se actúe con eficacia. Que cese la competencia desleal y que se invierta en los caminos, los que oxigenan este tesoro llamado naranja. Porque estas arterias son fuentes que alimentan un patrimonio que merece nuestro apoyo en las manifestaciones y nuestra inversión en los ayuntamientos.

Es necesario un plan director que asigne una cantidad anual a la conservación de los caminos. Que garantice el mantenimiento de unos trazados que irrigan nuestros campos. Y para ello hay que creer en la citricultura. Hay que creer en nuestras raíces. Hay que trabajar e invertir. Demos el paso.

*Portavoz del PP en Burriana