Para mí la libertad es una manifestación de responsabilidad y respeto hacia los que conviven a nuestro alrededor. Pero en esta época, es fácil abusar del significado de esta palabra. Por eso es importante no olvidar y enseñar los valores de respeto, de compartir las tareas y las responsabilidades dentro de nuestros propios hogares, sin distinción entre ser hombres y mujeres.

La atención que podemos brindar a nuestros hijos no podemos pasarla a un segundo plano. Con respeto, responsabilidad y mostrándoles los límites, es posible educarlos en libertad y en un entorno donde la confianza en sí mismos y hacia nosotros, les enseñen a vivir de la mejor manera posible con independencia y estabilidad.

Como miembro de las comisiones de Seguridad Vial y de Drogas en el Congreso, lo que más nos preocupa son nuestros menores. Los accidentes, el abuso del alcohol y de drogas, las ludopatías o la adicción a las nuevas tecnologías, son algunos de los grandes problemas de hoy. Por ello, estamos exigiendo cambios en nuestras leyes, regeneración del sistema en líneas más educativas y de concienciación en lugar de prohibición y castigo.

En cuanto a los planes de prevención ya contamos con muchos, pero nunca serán suficientes sino empezamos a reconsiderar la atención que como adultos brindamos a nuestros hijos. Así, es necesario crear una cultura social basada en el respeto y el rechazo a la intolerancia, tomándonos en serio la integración para avanzar en modelos de sostenibilidad e igualdad de oportunidades, ambos dos recogidos en la Constitución. Caminando en esta dirección desde C’s esta semana hemos conseguido que los animales dejen de ser cosas y que se luche por la gestación subrogada.

*Diputada de C’S en el Congreso por la provincia de Castellón