Al cierre de 2019 tramitamos la solicitud para participar en el certamen autonómico que cada año distingue con la etiqueta Capital Cultural Valenciana a un municipio de la Comunitat de más de 5.000 habitantes y a otro de menor tamaño. Lo hicimos con humildad pero con la convicción de que hemos dado muchos pasos (y seguimos dándolos) para hacer de nuestra programación cultural un espacio que refleje la diversidad que nos une.

Somos muchas las localidades que competimos por esta distinción, pero también lo son nuestros méritos: en 2019 celebramos la primera Matxà de Sant Antoni y la primera Semana Santa de Almassora bajo la declaración de Fiestas de Interés Turístico Provincial. Y cerramos el año de idéntica forma, con el primer Belén Viviente bajo esta etiqueta. Aquí conviven los actos más solemnes, como la madrugada del Jueves Santo con el sonido de Tambors de Passió, y otros de reciente creación en la localidad como el Festival Internacional de Cortometrajes Alma.

Nuestro patrimonio es el de las más de 8.000 visitas del Museu del Joguet en su emplazamiento del Mercado Central y también los ciclos de monólogos, Almassora Circ, Tots al Teatre o el cine familiar. La ópera convive con los éxitos de La Esmeralda y los conciertos de verano en las ermitas comparten espacio con las películas en Santa Quitèria o la playa en los meses de calor. El apoyo que ofrecemos a la cultura con fondos municipales no tendría sentido sin la veintena de agrupaciones dedicadas a difundir la música, la danza o el teatro.

Por ellos también optamos a esta declaración, al igual que en 2019 conseguimos entrar en la Red Española de Cultura que incluye a teatros, auditorios, circuitos y festivales de titularidad pública de todo el territorio nacional. La Casa de la Cultura es ya un escenario de primer nivel para un municipio del tamaño de Almassora, con programación durante todo el año gracias a la climatización con fondos Feder de la Unión Europea.

La ampliación de la biblioteca, los nuevos espacios para personas en sillas de ruedas en el salón de actos o las 19 ediciones de la Fira de Sant Andreu nos han llevado a continuar adelante con los trámites. Al fin y al cabo, hay tantas cosas que parecían imposibles y que hemos conseguido que ¿por qué no ser Capital Cultural Valenciana en 2020?

*Alcaldesa del Almassora