Querido lector/a, este fin de semana se han celebrado los congresos del PP y de Podemos Y si por diferentes motivos digo que han sido como un paseo en barca para sus líderes, llámense Mariano Rajoy y Pablo Iglesias, les aseguro que no digo verdad del todo pero me acerco mucho. Cierto. Digo cierto porque en el PP, como partido presidencialista, siempre ganan, en cualquier parte, las gentes y las posiciones políticas de quien preside --consultar a Carlos Fabra que también ganaba--. Sencillamente porque es quien reparte cargos, salarios…etc. Incluso recuerdo y sé --porque me lo explicaron-- que en la época de Aznar con los documentos se indicaba -las partes que tenían que quedar tal cual y las que admitían enmiendas. Ahora no se cómo estará el asunto, pero el presidente gana porque aún sin presentar ninguna idea para el futuro, sigue teniendo el poder de incluirte, apartarte o mantenerte. En cualquier caso, Rajoy o quien sea, aparece siempre como omnipotente.

Pero si he afirmado que no digo verdad del todo pero me acerco mucho, es porque a pesar de reconocer que en el Congreso de Podemos ha existido debate político y hasta discrepancias entre Iglesias y Errejón sobre el papel de Podemos --dialogar en el marco de la izquierda y gobernar o confrontarse y buscar ser el partido mayoritario…--, no es menos cierto que hay algo de paseo en barca porque los partidarios de Errejón estaban de acuerdo con el liderazgo incuestionable de Iglesias. Por cierto, no podía ser de otra manera porque Podemos y su fundación es algo tan reciente que, Iglesias, aún es algo más que secretario general y que un líder. Es una seña de identidad indiscutible. Perderlo aún hubiera sido debilitar Podemos. De ahí, también, se deduce el valor, la solidez y la gran dignidad política de Errejón. Otros, hubiesen lamido el culo y punto.

Querido lector/a, repito, un paseo en barca. Más o menos.

*Experto en extranjería