Los casinos de la izquierda

Creo que pertenezco a la generación última que ha conocido el apogeo de los casinos y centros recreativos en Castelló, que fueron tan abundantes sobre todo en la última década del siglo XIX. Al amparo de la ley de asociaciones de 1887, los grupos de izquierda instituyeron sus mutualidades, que les proporcionaron una considerable capacidad de movilización. De aquí nació el Ateneo Obrero Republicano fundado en mayo de 1879 por Huguet y Ros de Ursinos (que poco tenían de proletarios, siendo el primero comerciante y el segundo arquitecto), seguido del Casino Artesanos instalado en enero de 1882, presidido por el carretero músico y poeta Vicente Pérez Ripollés (alias Silvio Pellizco) . También conviene reseñar el Centro Democrático Instructivo fundado en septiembre de 1882, bajo la presidencia honoraria de González Chermá, Cheles, que contaba en su local de la calle de Caballeros con biblioteca, aulas de música, de dibujo y de enseñanza, y que motivó la reacción de otras colectividades semblantes como el popular Círculo Artístico y Literario, fundado un cuarto de siglo más tarde. Los republicanos contaron también, desde 1894, con un casino conocido como Centro Unión en la calle de Las Cruces (hoy Rey Don Jaime). En la calle Mayor tenía su sede, hacia 1885, el llamado Casino Pactista de la agrupación federalista de Pi i Margall y en la plaza de la Paz estaría, desde 1910, el Ateneo Radical del grupo lerrouxista. Muchos de estos casinos funcionaban como auténticas casas del pueblo, con funciones recreativas, culturales y educativas, dirigidas fundamentalmente a las clases obreras. Por supuesto, la burguesía acomodada disfrutaba del Círculo Mercantil y más en particular del Casino Antiguo.