Quizás estas cifras, a priori, no os digan nada: 3.000 y 22.750, pero sí son significativas: representan el total de alcaldes/esas y concejales/as del Partido Popular de toda España.

Somos mujeres y hombres que hemos sentido vergüenza de algunos, a quienes la justicia ya les está poniendo en su sitio. Ello no significa, sin embargo, que cualquiera pueda afirmar que todos nosotros pertenecemos a una trama mafiosa. Nosotros también estamos dolidos y cansados con los que militaban en nuestras filas y han protagonizado actitudes absolutamente vergonzosas y con quienes militan en otras y lo han hecho también. Nos duele porque somos gestores públicos dedicados y en muchos casos sin ningún tipo de remuneración.

ESTAMOS HARTOS de dobles raseros, de tener que escuchar según qué cosas, sobre todo de quienes deberían reflexionar sobre los suyos, pues quienes, a menudo, suelen proferir las críticas más duras y afiladas pertenecen a partidos que, como el Partido Socialista, solo en nuestra provincia son los campeones en número de condenados, con casos en l’Alcora y Vinaròs.

Los ediles del PP defendemos principios, ideales, tradiciones y a nuestros pueblos, y los vamos a seguir defendiendo, a pesar del manido «todos son iguales» con el que nos intenta dañar la izquierda.

No sé a los demás, pero tras lo que ha sucedido en las últimas horas en el Congreso, yo --personalmente-- me siento más comprometido y más fuerte que nunca en la lucha contra quienes dan lecciones y no les duelen prendas en pactar con quien ayer mantenían posturas del todo irreconciliables.

Los principios no se venden, se mantienen. Las convicciones no se mercadean, se sostienen.

Ahora, a seguir trabajando duro, demostrando honestidad y sentido de la responsabilidad, por nuestro país y por nuestros pueblos.

*Alcalde de Peñíscola