Han pasado 14 días desde mi último artículo en Mediterráneo. Dos semanas en las que Castelló ha vivido un proceso electoral que concluyó con la victoria de la candidatura municipal que tuve la satisfacción de encabezar. Después de la intensa campaña, y de una precampaña aún más larga, se completaba el proceso democrático en el que la ciudadanía se manifiesta y decide el sentido del gobierno de las instituciones. Tengo que expresar mi gratitud más profunda a las 25.550 personas que transmitieron con su voto la confianza en el PSPV-PSOE. Después de 32 años sin mayoría socialista, Castelló decidió abrir una nueva etapa en la que el Partido Socialista volvía a ser líder y asumía el reto de dirigir el futuro de la ciudad durante los próximos cuatro años. Gracias por la confianza y por otorgarnos esa responsabilidad.

Ahora es el momento de llevar adelante la tarea de gobernar. El propósito del Grupo Municipal Socialista en esta nueva etapa será desarrollar el espíritu del programa electoral con el que el PSPV-PSOE se presentó ante la ciudadanía el 26-M y recibió el mayor respaldo ciudadano. Un programa ajustado a los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, porque, como he dicho en más de una ocasión en estos días, el objetivo de hacer un Castelló mejor no puede ser diferente del que aspira a hacer un mundo mejor. Con esa voluntad vamos a emprender el inicio del mandato, conscientes de que es necesario continuar con la transformación de la ciudad que se inició en 2015. Después de tantos años de desgobierno, ineficacia, derroche y corrupción de la derecha, entonces se abrió un periodo de normalización democrática en la institución más cercana a la ciudadanía. La mayoría social apostó por el cambio y ahora, cuatro años después, ha consolidado esa vocación transformadora y ha dicho que hemos de ser las concejalas y los concejales socialistas quienes lideremos este proceso apasionante.

Un desafío que aceptamos y en el que nos vamos a volcar. Castelló ha creído en el proyecto que representamos y en la sensatez con que hemos afrontado hasta ahora la resolución de problemas heredados de los anteriores gestores, como la deuda municipal, la presión fiscal excesiva, la falta de Plan General, las ayudas a familias y colectivos necesitados… El balance de nuestra gestión demuestra lo que somos capaces de hacer. Y lo que haremos.

Castelló necesita un Ayuntamiento que asuma los grandes retos que se le presentan a las ciudades del siglo XXI. Vivimos tiempos en los que es más necesario que nunca abordar políticas que generen calidad de vida, que promuevan el bienestar colectivo, que impulsen la competitividad, que generen oportunidades de desarrollo personal… En definitiva: aspirar a la felicidad ciudadana, a vivir en una ciudad en la que merezca la pena vivir.

En esa tarea me encontrarán como alcaldesa y encontrarán a las compañeras y compañeros que me acompañan en el proyecto socialista. A todas y a todos nos une el amor por Castelló y el deseo de contribuir con nuestro esfuerzo al progreso de nuestra tierra. Vamos a anteponer el interés general a cualquier interés particular o partidista. Castelló por encima de todo. Estaremos a la altura.

*Alcaldesa de Castelló