La semana pasada, el Consejo Social de Castellón aprobó el documento Criterios y recomendaciones para la elaboración del presupuesto municipal 2018, elaborado por la comisión de Hacienda y Desarrollo económico del Consejo. Un informe que actualiza el que preparó la misma comisión el año pasado y que alentó buena parte de las líneas políticas inspiradoras de los presupuestos municipales de este año.

Son decenas y decenas de iniciativas propuestas por consejeros provenientes del mundo universitario, empresarial, sindical, vecinal, del tercer sector… Un recorrido argumental sobre el Castellón que queremos, que quiere la ciudadanía y que necesita esta ciudad para no perder las claves de su futuro. Que va a resultar también de gran ayuda en el proceso de elaboración de los presupuestos del Ayuntamiento para 2018 que ahora comenzamos.

CRÉANME SI les digo que es un gran honor acompañar los trabajos de esa comisión, ayudar a sus consejeros, preservar su independencia de criterio, aprender de ellos, de sus debates, sus discusiones y sus consensos. Sin duda, una de las tareas más reconfortantes que encuentro a lo largo del año en mi agenda de trabajo. Porque identifico ahí esa vocación altruista de compromiso con la ciudad, esa pasión por hacerla mejor, por dar un nuevo impulso a nuestra vida colectiva en términos de estrategia de ciudad, no solo en lo que anticipa la respuesta a los grandes retos que tenemos por delante, sino también a las micropolíticas municipales que atienden la mejora de la cotidianidad.

Gracias, pues, a quienes han elaborado el informe, miembros todos y todas del Consejo Social de la ciudad de Castellón. Y también, por supuesto, a los técnicos municipales por dar la cobertura necesaria.

*Concejal socialista en el Ayuntamiento de Castellón