Querido lector/a, en más de una ocasión he señalado que la concepción de que un solo partido puede expresar el movimiento de la izquierda, junto con la de que la izquierda sea considerada un movimiento exclusivamente político que se manifiesta casi únicamente en elecciones, son ideas que hay que dejar atrás. Por cierto, recuerdo que cuando he escrito esto, también me he referido a que la izquierda son los partidos políticos, los sindicatos y un montón de organizaciones ecológicas, feministas, sociales… etc. Aunque, de forma especial, los sindicatos. Por eso me alegré cuando en las primarias del PSOE, las del Pedro y Susana, al leer uno de los documentos que durante el proceso hizo público P. Sánchez, me encontré con aquello de que: para cambiar el modelo económico y social neoliberal era necesario potenciar las alianzas con las sindicatos de los trabajadores y, sobre todo con UGT y CCOO. Afirmación que tenía razón de ser porque ante la involución social y en derechos sufrida, hay que desarrollar la unidad de acción de las fuerzas que coinciden en construir una democracia avanzada en lo político y económico que haga progresar la justicia social. A eso, precisamente, P. Sánchez le llamaba Alianza Estratégica Básica o de Progreso.

Lo bueno, y ahí viene el detalle que quiero destacar, es que estos días veo como algo no muy habitual, pero necesario, que directamente desde la dirección orgánica del PSOE y en colaboración con los grupos municipales socialistas de España se presentan mociones que defienden que la recuperación económica llegue a los trabajadores. Eso supone, entre otras peticiones, aumento de salario o reparto más justo de la productividad. Cuestión esencial para el desarrollo económico. Por ello, el PSOE anuncia y propone a todos los agentes sociales y al Gobierno, un pacto de rentas. Repito, ese es el detalle, el diálogo necesario con los sindicatos.

*Experto en extranjería