El pasado día 27 de enero (27 Nisán, según el calendario hebreo), se celebró el Yom Hashu o Día Internacional de la Conmemoración de las Víctimas del Holocausto.

Los españoles no somos ajenos a esta celebración puesto que muchos de nuestros compatriotas, judíos o no, murieron el los campos de exterminio repartidos por la Europa central y del este durante la Segunda Guerra Mundial.

Se eligió esta fecha porque coincidía con la rebelión del gueto de Varsovia, sucedía a la Pascua Judía (Pésaj) y se continuaba con la celebración del día de las guerras de Israel y del día Nacional de este país.

En nuestra Comunitat hay aproximadamente entre 4.000 y 5.000 judíos practicantes. El mayor número se concentra en Valencia donde existen cuatro sinagogas o centros hebráicos. En nuestra provincia se calcula que el número se eleva a unos 700. A veces, son difíciles de detectar porque son prudentes y no hacen gala de su judaísmo. En ocasiones, se les identifica por la estrella de David o cualquiera de las cinco letras hebreas sofit que cuelgan de sus cuellos. Recuerden que en la época nazi, en los territorios invadidos, los judíos debían llevar visiblemente, en sus ropas, una estrella de David amarilla. El barrio judío en nuestra capital estaba ubicado en el centro histórico, entre las calles Caballeros (antes de la Judería), Enseñanza (hasta el siglo XVIII del Empedrado) y plaza de las Aulas, existiendo en este entorno l’Arc y el Pou de la Judería. Jaime II otorgó la licencia para construir el cementerio judío detrás de la plaza Clavé.

Así pues a las 12.00 horas de ese día, sonaron las sirenas durante dos minutos en todo Israel y el país se paralizó. Por mucho que nos cueste, tenemos que hallar la capacidad del perdón. ¡Shabat Shalom!

*Secretaría Área de Políticas Sociales y LGTBI PSPV-PSOE Castellón