Querido lector/a, a pesar de que haya a quién le siente a cuerno quemado el hecho de que, alguna vez, raramente, escriba de fútbol --imagino que son personas que desconocen que la vida no sólo esta hecha del material y los sentimientos de la política--, no hago caso y vuelvo al fútbol. Y es que la semana pasada apareció sir Alex Ferguson, el exentrenador del Manchester United, y mezclando ideas propias con lo que eran las conclusiones del Foro de Entrenadores de Élite de la UEFA, manifestó que el Madrid seguirá dominando el fútbol durante los próximos cuatro años, y que la pauta es seguir gastando mucho dinero, porque esa será la mejor señal de que el fútbol tiene buena salud.

¿Qué les parece? A veces uno se extraña de que esta gente, que son gurús o referencia del mencionado deporte, se dediquen a decir chorradas y a comportarse como patanes. Mourinho es ejemplo de ese estilo de comportamiento. ¿Qué por qué digo todo esto? Porque teniendo en cuenta que los propietarios del fútbol de élite son fondos de inversión, multimillonarias americanos, capos del petróleo, jeques, rusos, chino, etcétera, parece evidente que es imposible predecir el futuro. O también, porque al existir una inflación en el precio del alguas estrellas, el fútbol pierde capacidad de competencia y, en consecuencia, interés y vida. Además, el asunto está tan mal que se denuncian entre ellos, entre ligas y clubs porque se falsifican los presupuestos y se rompe el fair play.

Querido lector/a, como dice Xavi, el que era mediocentro del Barça y de la selección nacional, este tipo de entrenadores están sobrevalorados y se dedican a defender los intereses de sus propietarios, que son sacar beneficios, popularidad personal o potenciar sus empresas, negocios y marcas. Al final lo esencial, como sigue Xavi, es la calidad y el compromiso de los deportistas, y no perder de vista que el fútbol necesita entrar en coherencia.

*Experto en Extranjería