Este sábado pasado asistimos a la presentación del Sindicato de Inquilinos de Castelló, una agrupación de personas, hombres y mujeres, que bajo la figura jurídica de asociación han empezado su lucha por recuperar sus derechos y su dignidad.

Los inquilinos son los peor tratados por esta crisis, ya no hablo de crisis económica, sino crisis moral, crisis de ética, como bien dijo Javier, el presidente de la asociación. Nada de ética ni de moral tienen los actores que han hecho su aparición estos últimos meses en el joven barrio del Raval Universitari, me refiero a los fondos de inversión --fondos buitre-- que se han apropiado de las viviendas de alquiler donde modestamente vivían muchas familias castellonenses, con niños y niñas menores, con abuelos y abuelas que rondan los 70 años.

El impacto que dichos fondos está causando en el parque inmobiliario de la zona del Raval Universitari es de alto riesgo para la población que reside allí. Como ya ha denunciado Podem-EUPV en el Ayuntamiento de Castelló, estos fondos han comprado vivienda de protección oficial, tras perder su calificación. Estos fondos buitre están realizando un contundente y veloz vaciado de viviendas, expulsando a sus inquilinos y subiendo los precios en un 60%. ¡No hay derecho! Esto me recuerda a la controvertida compra por parte de Blackstone a la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo de Madrid allá por 2013 de más de 1.800 viviendas sociales cuando en el ayuntamiento lideraba el PP. Tal maniobra causó un severo perjuicio a los inquilinos, cuyos alquileres experimentaron una fuerte subida.

Desde las instituciones nos ponemos de lado de las personas, no podría ser de otra manera. Tanto la concejalía de Vivienda, que gestiona Podem-EUPV en el Ayuntamiento de Castelló, como la Generalitat Valenciana, trabajan codo con codo a fin de activar una serie de instrumentos que permitan hacer frente a los fondos buitre y ampliar el número de viviendas del parque público. Porque es público y notorio el aumento de descalificación de antiguas viviendas de VPO destinadas al alquiler. Es público y notorio que estas viviendas han caído y están cayendo en las garras de los fondos buitre. Y esto lo tenemos que parar.

Hace unos días lo explicó César Jiménez, secretario autonómico de Vivienda. Algunos de estos instrumentos están operando y otros están en los planes de la Conselleria. A modo de ejemplo, todo fondo que vaya a adquirir vivienda que haya sido VPO, ha de comunicárselo previamente al Consell, que tiene cuatro meses para ejercer el derecho de tanteo y retracto y así poder comprar la vivienda igualando el precio.

No me resta más que desear a la Asociación mucha fuerza y coraje en su lucha, una lucha muy legítima porque, aunque no se trata de una casa en propiedad, es una casa en alquiler, es su piso, su morada, su palacio. Porque para cada cual el lugar donde mora, el sitio donde habita es su palacio. Al menos es lo que me enseñaron a mí de pequeña. Por más modesta que sea tu morada, por más que sea de alquiler, es tuya, es tu refugio al que llegas cada tarde o cada noche a descansar, a recogerte con los tuyos y a coger fuerzas para empezar otro día más. Hablamos de dignidad.

*Diputada de Unides Podem por Castelló en Les Corts