Han pasado ya dos días desde que en Benicàssim nos despertamos sacudidos por una terrible tragedia, pero el dolor y la rabia no nos ha abandonado aún. Un hombre asesinó de manera cruel a su mujer e hirió a sus dos hijos. El alma humana nunca estará preparada para asumir esa barbarie. No existen ni razones ni motivos suficientes nunca para utilizar la violencia, pero mucho menos, si pensamos que a quien estás agrediendo son las personas a las que se presume que quieres.

La lucha contra la violencia de género, no es la celebración de un día al año, ni todos los silencios que públicamente demuestran que estamos contra estos sucesos y al lado de las víctimas. El trabajo ha de ser diario. Las administraciones ponemos todos nuestros recursos a disposición de las personas. En el caso del Ayuntamiento de Benicàssim, se hace un seguimiento de los casos de los que se tiene conocimiento, a través del grupo contra la violencia, Viogen, en el que participan personal de las fuerzas de seguridad y también de la asistencia social.

Pero no es suficiente. En la conciencia de cada uno ha de haber el suficiente valor con la erradicación de la violencia para detectar cuando una vecina, una amiga, una conocida, quien sea, está sufriendo abusos, acoso o agresiones. Hemos de ser valientes para denunciar los hechos, aunque nos toquen de manera tangencial. H

*Alcaldesa de Benicàssim