Cuando las cosas se hacen bien y con la verdad por delante, creyendo en lo que haces, tienen su recompensa. Después de media década de litigios para impedir que nuestro municipio tuviera una incineradora que contaba con el rechazo unánime de todo el pueblo, la justicia da la razón a los vecinos y, con la sentencia del Tribunal Supremo en la mano, decimos adiós definitivo a la incineradora.

L’Alcora demostró a toda la provincia que unida es capaz de todo. Una lucha de gigantes que impulsamos desde el Partido Popular en nuestro anterior mandato. Una buena noticia, sin duda, que contrasta con la imagen de esta semana del exalcalde de l’Alcora sentado en el banquillo por un presunto delito de corrupción urbanística por la adjudicación en el 2004 de la revisión del PGOU, muestra dos caras de una misma moneda.

Frente a un gobierno anterior presuntamente corrupto, el Partido Popular en el 2011 dio la vuelta a la tortilla; ejemplo de participación, transparencia y unión, consiguió que todo el pueblo se volcara por una misma causa, la que hoy, es motivo de alegría y hace de contrapeso a la imagen negativa de Peris y los concejales socialistas entre las cuerdas que deberán justificar con argumentos si es verdad eso del que el exalcalde pidió que miraran con cariño a una empresa para que fuera la adjudicataria, tal y como se detalla en un escrito de la Fiscalía provincial.

Dicho esto, esperemos que este nuevo tripartito de l’Alcora siga con la trayectoria de seriedad y responsabilidad del gobierno del Partido Popular y no tome ejemplo de sus compañeros socialistas, cuyo legado ha sido deuda, despilfarro y una foto para el recuerdo de un equipo, capitaneado por el alcalde, de políticos corruptos, que empaña la buena imagen de un pueblo, l’Alcora cuyo espíritu de lucha debe ser referente para otros municipios.

*Concejala del PP en l’Alcora