Un purista de la objetividad diría que los números no son interpretables, que dos más dos son cuatro, lo mires por donde lo mires, y que salvo que se produzca una mutación genética, buscarle los cinco pies a un gato es como pedirle peras al olmo, pero como la lengua no tiene hueso, y no hay mayor verdad que la que uno quiere creerse, pues estos días hemos vuelto a asistir a una nueva exhibición de cum laude del señor alcalde de Nules, de adaptar la realidad a lo que más le interesa. Está tan convencido de su infalibilidad, que dentro de poco conseguirá que en la Wikipedia, al lado de la definición de Don Perfecto, pongan una fotografía suya.

El resto de la humanidad sabemos que somos imperfectos, que nos equivocamos, que a veces, incluso poniendo los cinco sentidos para que algo salga bien, te equivocas. La clave para hacer frente a los errores es ser capaz de reconocerlos y tratar de buscar soluciones.

Pero él está inmunizado contra este defecto que compartimos el resto de humanos. Y como todo lo hace bien, no le tiembla la voz al decir que ha cerrado el presupuesto del 2017 con un remanente de tesorería de 1.900.000 euros, callando, por supuesto, que en el mismo pleno en el que dijo una cosa, aprobó que se pagaran 500.000 euros de facturas sin consignación, gastos no previstos y que se acumulaban en cajones a la espera de conseguir dinero.

Que lo que no se le puede reprochar es que no sepa de dónde sacar ese dinero: del bolsillo de los vecinos. Así le salen las cuentas a cualquiera: cobrar más a la gente por todo. Han convertido a la Policía Local es su cuerpo recaudatorio. Persiguen a los ciudadanos para que paguen más por los vados, por la grúa, por todo lo que se tercie y pueda ser sancionable. ¿Concienciar al vecino para que cumpla las normas?, ¿para qué, si podemos rascarle el bolsillo?

Y mientras tanto, calla su deficiente gestión en los únicos proyectos que impulsa, como el de la Cámara Agraria, con un modificado de obra que no sabemos cuánto nos va a costar, y cuenta lo que le conviene sobre el párking. Creer que la realidad se resume en los me gusta del Facebook, no es la mejor manera de coger el pulso a los vecinos.

*Concejal y presidente del PP de Nules