Un paréntesis, eso es lo que el conseller Marzà ofrece a la educación concertada de la Comunitat Valenciana. Pero este gesto de generosidad no se debe a las alegaciones de los centros, se debe a que el ruido de las familias y, unas elecciones generales, no son compatibles. Pero que nadie se lleve a engaño, esto no ha hecho más que empezar. El conseller de Educación tiene muy clara su hoja de ruta y nadie le va a hacer salirse de ella.

No hay que bajar la guardia, no hay que creerse la buenas palabras, no hay que ceder; lo que hay que hacer es reivindicar con energía una enseñanza plural.

Este Consell no engaña a nadie y en materia de educación ya sabemos cuál es su objetivo: aniquilar la educación concertada. Nos gobiernan unos hooligan sectarios que quieren que desaparezca todo lo que no entra en su ideario; prueba de ello ha sido la propuesta del tripartito de eliminar aulas concertadas, el 95% de ellas de centros religiosos. Es un ataque sin precedentes a la libertad de pensamiento, a la libertad de elección de centro de las familias y a la libertad de modelo educativo que recoge la constitución.

Esto es la educación a la valenciana, la educación de los nuevos tiempos… un modelo donde la mediocridad se impone a la excelencia y el adoctrinamiento se impone a la libertad. H

*Diputada autonómica del Partido Popular