El pasado sábado, Ciudadanos renovó las agrupaciones locales quedando reestructuradas en Castelló, Vila-real, la Vall d’Uixó, Vinaròs, Benicàssim y Oropesa del Mar. Como coordinadora provincial, quiero dar la bienvenida a los nuevos equipos y animarles a trabajar duro por sus ideales. Los ideales que compartimos y que les han llevado a entrar en un partido político para aportar su trabajo por el bien de la democracia, y siendo mi principal prioridad instaurar la tan necesaria estabilidad interna, desarrollando un verdadero equipo al servicio de la ciudadanía.

Las estructuras internas que tienen la gobernanza de nuestro partido, emanan de distintos órganos, uno institucional, que integra los cargos electos, y otro orgánico, vinculado con las agrupaciones locales, bases y afiliados. Esta estructura se diseñó con la intención de fomentar la participación y la diversidad de opiniones, tan necesarias para la buena salud de un sistema democrático.

Las discrepancias dentro de una misma organización forman parte de la libertad de expresión, y de una estructura democrática, tema que se encuentra de absoluta actualidad. Lo hemos podido comprobar en España con otros procesos internos en distintos partidos políticos y lo seguiremos comprobando en un futuro.

A día de hoy, Ciudadanos atraviesa un momento difícil con la pérdida de votantes en Cataluña y por ello, debemos parar y reflexionar sobre lo aprendido para definir si dichas estructuras son las más idóneas en este momento crítico, o deberíamos plantear esquemas que fomenten aún más la unidad de quienes trabajamos por y para el partido.

Como coordinadora provincial tengo el compromiso y la responsabilidad de conocer a fondo cada proyecto, cada equipo y poner en marcha la estrategia que será nuestra hoja de ruta en los próximos años, donde deberemos tratar de recuperar el espacio de centro y mantenerlo, presentando un proyecto propio liberal, progresista, reformista, limpio y transparente, abanderando la regeneración democrática tan necesaria en estos delicados momentos y con el único objetivo de sumar, de aportar experiencia política y hacer crecer la estructura de afiliados.

Quedan por delante dos años de durísimo trabajo para recuperar la confianza de los electores y cada paso que demos debe ser en la buena dirección. La de premiar el trabajo y esfuerzo, escuchando los problemas de la gente para después aportar soluciones reales y no promesas incumplidas. España necesita un proyecto de país, real y no lleno de mentiras e intereses partidistas como el actual. H

*Portavoz de Ciudadanos en la Diputación Provincial y teniente alcaldesa de Benicàssim