Si Hans Cristian Andersen hubiera vivido en el siglo XXI, digamos que en esta provincia, en Nules para más señas, seguramente habría escrito la famosa fábula de El traje nuevo del emperador con la misma genialidad, pero con un fundamento de lo más consistente para dar todo el sentido a la popular moraleja: no tiene por qué ser verdad lo que todo el mundo dice que es por no llevar la contraria al que manda.

Si el autor tuviera la oportunidad de reescribir hoy y aquí El rey desnudo contaría algo así como que «Érase una vez un pueblo en el que gobernaban un grupo de políticos que solo tenían un empeño, demostrar a todo el mundo lo amigos que eran». No tenían nada en común, pero poco les importaba. Les ofrecieron la única oportunidad en su vida de sentarse en el trono con la condición de que debían hacerlo todos a la vez. Ambiciosos como eran, no dudaron eludir el inconveniente principal de sus evidentes contradicciones por ver saciadas sus ansias de poder. Muchos traseros para tan poco asiento, sin duda una trama sin desperdicio para cualquier fabulista.

El pueblo no se llamaría Nules, se cambiaría el nombre por otro con más significado para la historia: Desferperdesfer, por ejemplo. En el pueblo de Desferperdesfer, sus gobernantes tenían una dedicación diaria: buscar alguna manera de distraer a sus vecinos sobre su incapacidad para ocupar un trono sobre el que no sabían cómo sentarse sin ser aplastados los unos por los otros. Todos ellos eran unos grandes expertos en el arte de aparentar y, al igual que el emperador encargó el traje más hermoso del mundo para exhibir su apariencia, el grupo de amigos --que en realidad no lo era-- se dedicó a difundir fotos y mensajes edulcorados, donde el decorado y el disfraz eran lo más importante.

Los gobernantes de Desferperdesfer se exhibían satisfechos porque todo eran halagos y risas a su alrededor. Y ellos eran felices. Y así, gobernando sobre una mentira maquillada a golpe de talonario, vivían de espaldas a la realidad por pura autocomplacencia. Pero como el traje del emperador, la suya es una mentira transparente y se les están viendo todas las vergüenzas.

*Concejal y presidente del PP de Nules