José de San Martín (1778-1850), militar y político, reconocido como uno de los libertadores de América por su contribución a la autodeterminación de una gran parte de la América española dijo: «La soberbia es una discapacidad que suele afectar a pobres infelices mortales que se encuentran de golpe con una miserable cuota de poder».

Sí, ya sé lo que estáis pensando. Me refiero a los nuevos gobiernos de izquierdas, esos que estaban agazapados, a la espera de «tomar el poder por asalto», como decía Marzà, que llevaban años acumulando odio y ansias de venganza, y claro, a la mínima que han tenido la oportunidad han tomado el poder, para mandar, que no gobernar, en beneficio de afines y con intereses meramente partidistas.

Como no sabían a lo que venían y no tienen ni idea de lo que es la gestión, a la primera ocasión han delegado sus responsabilidades. Ximo Puig, por ejemplo ha decidido que como no se aclaran a hacer colegios que los hagan los alcaldes, asumiendo informes desfavorables y responsabilidades que no les corresponden; las listas de espera en los hospitales se han triplicado, y lo mismo ocurre con las pruebas diagnósticas. Eso sí, le salen las cuentas para gastar 55 millones al año en una tele pública, o para darle subvenciones a su hermano para mantener los medios de comunicación afines al régimen.

Su discapacidad es la soberbia. No se dan cuenta que los valencianos necesitamos un gobierno estable y que gestiones para todos, ahora se han enfrascado en ver quien tiene la mejor idea para aniquilar las diputaciones. Es curioso, que el mismo día que salen Puig y Oltra discutiendo como nos hacen desaparecer, se publique el listado de obras que se van a llevar a cabo en los 135 municipios de la provincia de Castellón. Y es que el lunes aprobamos en pleno de la Diputación de Castellón la concesión de más de 10 millones de euros para que nuestros municipios hagan 186 obras en la segunda fase del Plan 135, que junto con la primera ha supuesto la mayor inversión en nuestros municipios en un año, concretamente 24,8 millones de euros.

Esto es creer en nuestra provincia y trabajar para que exista una igualdad de oportunidades real, quien quiera fulminar las diputaciones es porque no conoce el territorio, ni sus necesidades, ni la riqueza que generan nuestros pueblos, ni la importancia de que no eche el cierre ninguno de ellos. Es una lástima, que por una mísera cuota de poder se aventure uno a vender una provincia, una comunidad o incluso un país. Hablando de vender un país, de la discapacidad soberbia del presidente Sánchez, hablamos otro día.

*Secretaria general PPCS