E Es una responsabilidad ponernos de acuerdo a nivel estatal para llegar a conformar un gobierno de coalición cuanto antes, como el del Botànic en nuestra autonomía valenciana o como en Aragón, Baleares o Navarra, porque el gobierno de España debe ponerse a trabajar ya para las personas, para los habitantes de toda la geografía española.

Y ponerse a trabajar por las personas empieza por obtener los fondos suficientes para realizar las políticas públicas adecuadas que redunden en la mejora de la calidad de vida de las personas que nos votaron. Para ello es sumamente necesario que se desbloquee el envío de los anticipos a cuenta del año 2018 y una parte del IVA del 2017 debido a la falta de gobierno en España. Los valencianos merecen una educación y una sanidad de calidad y pública al cien por cien, unos servicios sociales inclusivos que ejerzan una función de prevención y de cohesión social y que garanticen sus derechos fundamentales. La ciudadanía no merece oir hablar de ajustes ni recortes.

Hablar de ajustes presupuestarios, lo cual se traduciría en recortes, es impensable para nosotros como fuerza política que tiene a las personas como centro de sus acciones. No podemos permitir el inmovilismo del gobierno en funciones. No hacer nada.

A día de hoy no llegan las transferencias que debe hacer el gobierno central a las comunidades autónomas por el pago de impuestos y mientras tanto los derechos sociales de todos los habitante. No se ha actualizado las remesas de dinero a cuenta de la financiación y mientras tanto, la prestación de servicios básicos a los ciudadanos, también a los de nuestra comunidad autónoma, se ve afectada.

Somos conocedores que la Comunidad Valenciana es una de las autonomías peor financiadas. Al actual sistema de reparto insuficiente se suma la acumulación perseverante y progresiva de la deuda pública por la exigencia de obtener liquidez para enfrentar los diferentes pagos de la atención a los ciudadanos. Esto que hemos venido haciendo durante años tiene como consecuencia la producción de una deuda histórica y una desmesurada barrera económica. La falta de financiación sitúa a los valencianos en el 85% del gasto autonómico, destacando que la Generalitat se ha acercado a la media autonómica de los gastos tanto en Sanidad como en Educación. Esto muestra el gran trabajo de nuestro primer Pacte del Botànic. Pero, no podemos bajar la guardia. No obstante, otras áreas como Empleo o Vivienda se han quedado rezagadas.

La Conselleria de Vivienda es la encargada de gestionar la ampliación del parque de vivienda pública en alquiler, esencial para lograr reducir y extinguir las burbujas especulativas..

Los servicios sociales básicos han de proveer de viviendas para uso compartido de personas en riesgo de exclusión social. Ambas cosas no se pueden hacer si no tenemos la financiación suficiente y si seguimos siendo la autonomía más castigada. Para Unides Podem, la prioridad es que esta falta de gobierno y sus efectos en los presupuestos autonómicos no atenten contra los servicios básicos, los derechos sociales y bienestar de las personas, porque los merecemos una vida digna y construir un mundo mejor.

*Diputada autonómica de

Unides-Podem