Malos augurios. Y es que todos sabemos que las bases de una construcción son el elemento más importante de cualquier edificación, porque la cimentación es el asiento sobre el que todo va a descansar. Por eso, la máxima de los arquitectos que dice que de un buen cimiento dependerá la estabilidad y la durabilidad de la construcción, es aplicable al mundo de la política.

Así, un gobierno construido sobre una frágil cimentación sólo hace presagiar una situación política convulsa, inestable y efímera. Y el ejemplo lo tenemos aquí, en nuestra propia casa. La alcaldesa socialista acuñó el término «Ayuntamiento de cristal» al principio de la legislatura y no pudo acertar más… El gobierno bipartito que dirige ha demostrado en tres años que la fragilidad es una propiedad que comparte con el cristal, pues el acuerdo al que llegaron socialistas, independentistas de Compromís y radicales de Castelló en Moviment Podemos se sustentaba exclusivamente en su rechazo y rencor hacia el Partido Popular por haber seguido siendo la formación política con mayor respaldo electoral. Tres años han bastado para confirmar que sobre semejantes cimientos, difícilmente se construye un proyecto sólido de ciudad.

El Ayuntamiento de Castellón funciona gracias a los funcionarios, pero la ciudad lleva tres años estancada y sin rumbo claro, piensen si no en qué proyectos o ideas de futuro está trabajando el bipartito. ¡Un puente en la UJI que ha dividido a los vecinos y poco más! Cuando visito los barrios y las asociaciones de vecinos, les pregunto en qué han notado el cambio, y les pido que me digan tres cosas que haya hecho este gobierno... Ninguno sabe decirme más que pintar los banquitos de colores, que les han aumentado la burocracia para cualquier gestión, y que pagan más tasa de basuras… Pocos proyectos y menos futuro, resultado de unos frágiles cimientos…

*Portavoz del Grupo Municipal Popular en Castellón