En mi ciudad, Vila-real, asistimos a una parálisis generalizada en la gestión del PSOE de Benlloch ya que nuestro alcalde está centrado en ser un aspirante a dirigente de todo el socialismo de la provincia, antes que atender los intereses de su ciudad y preocuparse de las necesidades de sus ciudadanos.

Desde el Partido Popular hemos puesto en marcha esta legislatura la campaña A peu de carrer que se ha convertido en una herramienta eficaz que permite que las inquietudes y necesidades de los vecinos se pueden trasladar al Ayuntamiento. Comenzamos con las exigencias de los vecinos con los presupuestos y, ahora, cada vez que los vecinos de Vila-real tienen problemas, nuestro objetivo es estar a su lado.

El Partido Popular quiere ser un partido útil, cercano, que sirva para recoger las propuestas ciudadanas y hacerlas llegar a los que desde su mayoría absoluta no escuchan. Hay demasiadas pruebas de ello: los recortes en sanidad con la eliminación de los médicos del centro de salud de Torrehermosa, el anuncio de eliminar el plurilingüismo del José Soriano, no atender las peticiones de los clubes de fútbol o las solicitudes de los vecinos respecto a la limpieza.

Gobernar una ciudad es conseguir que avance y atender la pequeña reivindicación, aquella que permite mejorar la calidad de vida del ciudadano que paga sus impuestos. Detrás de los grandes titulares debe haber un proyecto de futuro, no de lucimiento personal. H

*Portavoz del PP en Vila-real