El Gobierno no para de mentir e improvisar. Nos ha mentido desde el inicio de la pandemia con la cifras de infectados y de víctimas fallecidas. Nos mintieron cuando nos hicieron creer que no había que tener miedo al coronavirus, porque iba a ser cosa de «solo algún caso diagnosticado» (Simón dixit). Había que salir en masa a las calles a celebrar el 8-M. Cinco días después, se reconoció la pandemia y se declaró el estado de alarma, que quieren prorrogar al más puro estilo bolivariano.

El Gobierno continuó mintiéndonos con las compras de los miles de tests defectuosos y de las mascarillas fake. Nos siguen mintiendo con los datos económicos. Niegan una evidencia, una situación crítica: un desplome histórico del PIB del 5,2% y que se espera llegue incluso al 12%. Un auténtico desastre económico, que la vicepresidenta Calviño no ve. Engañan con los ERTE. Y total improvisación del Gobierno, rectificaciones una tras otra, normas imprecisas, publicadas en el último momento (recordemos el episodio sufrido por nuestras azulejeras, a quienes obligaron a parar los hornos con solo un margen de horas).

Y qué decir de la desescalada: nos mintieron haciéndonos creer que íbamos a pasar a la fase 1, y miles de hosteleros se quedaron con las persianas bajadas. Y ante este Gobierno de la mentira y la improvisación, el Partido Popular propone el Plan Activemos España, porque hace falta menos estado de alarma y más medidas sanitarias, jurídicas y económicas para defender a los españoles de las consecuencias de la pandemia y activar nuestra economía. Frente al gobierno de la alarma y el presidente de la mentira, hay un Plan B, el del PP y Pablo Casado.

*Senadora del grupo parlamentario popular