La noticia se ha esparcido como la pólvora y es que el tema de un supuesto maltrato a niños acogidos en un centro regentado por una orden religiosa, en Segorbe, no ha hecho sino que hacer saltar las alarmas a todos los niveles.

Que el centro pueda ser una jaula de oro, no significa que los niños hayan podido ser tratados adecuadamente. ¿Cómo es posible que siendo como es que el Consell ha financiado con 2.235 euros mensuales para cada una de las 24 plazas adjudicadas, cuando en realidad solo habían 18 plazas cubiertas, se hayan detectado presuntas irregularidades en la alimentación, vestimenta y otros aspectos?

Hay medios suficientes para poder tratar adecuadamente a los niños, quienes, por circunstancias, se ven privados de una vida familiar conveniente. Hay circunstancias que hacen necesaria una investigación para determinar si los fondos aportados por el organismo oficial han sido invertidos adecuadamente en beneficio de los niños acogidos bajo la responsabilidad del centro que nos ocupa.

De todas formas, yo pregunto que, suponiendo que hayan habido unas inspecciones por parte de los servicios sociales implicados para dar visto bueno a no solo las instalaciones, sino a los demás aspectos referidos al trato, la alimentación, etc. a los niños, ¿cómo es que ahora se detectan estas irregularidades? ¿Se trataba de visitas de inspección programadas o por sorpresa? Aspecto importante este.

Si de pagos pendientes al centro se trata, ¿por qué la dirección del centro no hizo pública la falta de recursos para atender a los niños? Si es así, habrá que depurar las responsabilidades. Cuanto más claro, mejor.

*Secretaria provincial de Derechos Civiles del PSPV-PSOE de Castellón