Uno de los días más emocionantes que recuerdo en política fue el 14 de marzo de 2004. Ese día José Luis Rodríguez Zapatero ganaba las elecciones generales después de aquellos trágicos días posteriores a los terribles atentados de Madrid y de los que poco tiempo después supimos que fueron días de infamia y mentira del Partido Popular más oscuro.

De aquellos días, recuerdo sobretodo las caras de rabia y hartazgo en mis vecinos y amigos que venían a votar al colegio electoral, ciudadanos que pedían saber la verdad, pero sobre todo pedían cambios. Recuerdo llegar a la sede del PSOE y ver las caras de alegría e ilusión, con lágrimas en muchos casos. Por fin salíamos de una época triste en España.

Una sensación parecida sentí el pasado 7 de enero, cuando por fin Pedro Sánchez era investido presidente del Gobierno. Sentí la misma ilusión en la calle, sentí que por fin salíamos del letargo al cual las derechas nos habían abocado a todos los españoles con su bloqueo parlamentario. Sentí que por fin España volvía a avanzar. Sentí la ilusión compartida con muchísimas personas que confiamos en Sánchez. Esa es nuestra impronta, la de los socialistas. Y es lo que la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, está haciendo en nuestra ciudad.

En poco tiempo se han finalizado las obras del nuevo centro de día de Alzheimer de la Pineda --cerrado desde 2012--, se ha abierto al tráfico el nuevo Camí la Plana, la nueva sede de la Policía Local del Grau y hemos finalizado la reforma del pabellón Pablo Herrera, entre otros proyectos. Un gobierno municipal que cumple con su palabra, da respuesta a las demandas históricas de la ciudadanía y que genera ilusión.

*Portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Castelló