Un Gobierno central comprometido es el que ha hecho que Castellón avance a manos del Partido Popular, que hará que la provincia se suba al tren de la alta velocidad este año. Un Gobierno responsable que apuesta de manera seria y firme por infraestructuras útiles e inversiones que mejorarán las comunicaciones de la provincia.

El Ministerio de Fomento invertirá en esta legislatura 335 millones de euros en el tren Sagunto-Segorbe-Teruel. Mejoras en el sistema ferroviario que se suman al anuncio de ampliar frecuencias con el norte de la provincia, a la mejora del mapa viario de Castellón con la prolongación de la A7 hasta Traiguera, la mejora de la N-232, más la continuación de las obras del Corredor Mediterráneo, y obras de accesibilidad ferroviaria en el Puerto de Castellón.

PERO SI ECHAMOS la vista atrás y miramos lo que hicieron los gobiernos socialistas durante sus etapas de gobierno, vemos que la diferencia es clara: mientras el PP invierte y apuesta por oportunidades e infraestructuras de futuro, el PSOE tiró 1.800 millones de euros al mar con el Castor, y nos dejó en herencia unas desaladoras millonarias.

Es decir, el Partido Popular crea oportunidades y apuesta por infraestructuras útiles para Castellón que se convertirán en motor de empleo y crecimiento económico, mientras la herencia de los socialistas en la provincia viene en forma de infraestructuras inútiles y ruinosas, con terremotos incluidos que hacen tambalear cualquier intento de crítica o lección que pueda venir ahora de las filas socialistas, que por responsabilidad deberían callar y tratar de arrimar el hombro en lugar de intentar bloquear con su voto en contra actuaciones como estas que responden a las necesidades reales de los castellonenses.

*Senadora del PP por Castellón