Pedro Sánchez y Pablo Iglesias están dispuestos a poner las cosas en su sitio. Los dos juntos, y con el apoyo de otros 21 ministros, todos ellos ya nuevos ricos; quieren definir con claridad lo que es cierto y lo que es falso.

Y, sobre todo, Pedro y Pablo quieren decidir lo que los españoles podemos escuchar/leer/ver y lo que los españoles no podemos escuchar/leer/ver.

Vamos, que quieren poner puertas, cerrojos y hasta vallas electrificadas a la información y a la libertad de expresión. Pero seguro que lo quieren hacer por el bien de todos… Para ahorrarnos algún que otro disgusto.

Por eso han decidido crear lo que ya algunos califican como el Ministerio de la Verdad y otros como el Ministerio de la Censura. Y es que los ciudadanos (por lo menos los de España) debemos ser tontos y no tenemos capacidad de diferenciar la verdad de la mentira, y Pedro y Pablo nos indican, en tono paternalista, por dónde debemos ir y por dónde no debemos transitar…

Bajo ningún concepto puedo estar a favor de una medida que parece redactada por los hermanos Castro o por el tándem Chávez-Maduro , dictadores venerados por el Gobierno (socialcomunista) de España, un gobierno de flamantes burgueses que tan solo sabe subirse los sueldos y colocar a parejas y amigos en puestos muy bien remunerados… Un gobierno que ha basado su política en el engaño y en la mentira.

Espero que está nueva ley sirva, al menos, para hacer públicos los nombres del comité de expertos que gestionan la pandemia, el verdadero número de muertos por el covid-19, ¿cómo consiguió el doctorado el presidente Sánchez y quién escribió su libro? ¿Con quién vino el presidente Sánchez a Benicàssim en su avión Falcon? ¿Qué pasó con Ábalos y la vicepresidenta de Venezuela en Barajas? ¿Cuáles son las condiciones de la hipoteca por el casoplón de Iglesias y Montero? ¿Qué pasó con la tarjeta del móvil de la podemita Dina Bousselham ? ¿Quién dirige RTVE? ¿Quién cocina las encuestas del CIS? ¿Qué favores deben a Bildu? ¿De quién depende la Fiscalía?

El gobierno de Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y otros 21 --y costosísimos-- ministros ha demostrado que no sabe decir ni una verdad, y que cualquier estratagema es válida para engañar a los ciudadanos. Y es que lo único cierto en este gobierno es que todo es mentira. H

*Alcaldesa de Vall d’Alba y diputada provincial