Lento y contento. Y no es una canción de reguetón, de las que suenan pegadizas en verano, es el funcionamiento del Ayuntamiento de Castellón. Lento porque lleva tres meses de Estado de Alarma viéndolas pasar, paralizados, sin tomar decisiones, con falta de liderazgo... Y Contento, porque deben dormir a gusto por las noches, ya que ni hacen ni dejan hacer, porque nos votan sistemáticamente que NO a todas las propuestas de la oposición. Independiente de que nos las hayan sugerido los colectivos, la ciudadanía... nos las aplastan con su rodillo. Ni UNA sola de nuestras propuestas ha sido buena para ellos.
Están más preocupados de mirarse de reojo, de conservar sus sillones y de los intereses políticos de sus siglas, que de apoyar a los castellonenses en sus momentos más duros. Están siguiendo en manual de resistencia de Pedro Sánchez y su No es No. Nos ha quedado claro de quién toma el modelo de gestión de la crisis Amparo Marco.
Las instituciones deben no solo resolver los problemas, sino también anticiparse a ellos. Y eso es lo que no está ocurriendo en la ciudad de Castellón, para mala suerte de los castellonenses. El lunes entramos ya en Fase 2, pero hasta la puerta del propio Ayuntamiento sigue hoy cerrada. Si quien tiene que dar ejemplo no lo hace, ¿qué podemos esperar del resto de cuestiones que dependen del consistorio?
Este es el problema. Vemos que Castellón va avanzando en la desescalada, mientras el equipo de gobierno sigue en la Fase 0, por los líos internos y el conflicto permanente en el que se han instalado los partidos del Acord de Fadrell. ¡Perdemos oportunidades! Justo lo que ahora mismo no nos podemos permitir.
*Portavoz del PP en el Ayuntamiento de Castellón
