Finalizadas las fiestas del Cristo, toca hacer balance. Un balance que evidencia los recortes injustos y la mala planificación y organización del tripartito. No deben de estar muy contentos cuando el propio concejal de Fiestas reconoce «que hay cosas para perfilar e ir corrigiendo». Han sido muchas las quejas que nos han trasladado ciudadanos, peñas y aficionados taurinos, cada uno en su campo de actividad, pero todos con la misma conclusión.
Con dinero el señor Pejó, concejal de Fiestas, podía tapar todas las deficiencias de su mala gestión pero con el poco dinero que le han dejado al Sr. Falomir, estas fiestas han sufrido recortes en actos importantes y multitudinarios como la novillada y el encierro cerril provocando numerosos errores «de libro». Para que unas fiestas salgan bien es primordial planificar y organizar con tiempo cada uno de los actos y en esto han fallado como una escopeta de feria.
La improvisación no es un buen aliado. Es fundamental escuchar y atender a los agentes implicados y no ha existido coordinación ni con las peñas, ni con los pubs, ni con las charangas, ni con las empresas colaboradoras, ni con la parroquia, ni con las floristerías, ni con la televisión, ni con la brigada.
Otro factor importante es disponer de partida económica suficiente para llevar acabo el programa sin necesidad de despilfarro. El secreto de un buen gestor es saber hacer más con menos y tener conocimientos en la materia, cosa que el tripartito ha demostrado no tener. Sentimos que unas fiestas con un Presupuesto tan elevado, se hayan visto afectadas por la incapacidad de un gobierno que está por otras cosas y pero no por el pueblo. Menos mal que peñas, asociaciones, empresas y demás patrocinadores con sus aportaciones han contribuido a seguir haciendo grande las fiestas y han hecho posible que muchos actos pudieran realizarse.
*Senadora y concejala del Partido Popular en l’Alcora
