Seràs la clau que obre tots els panys». El verso de Vicent Andés Estellés es parte del poema que hemos elegido este año para felicitar la Navidad desde el Ayuntamiento de Almassora. A tres días de aprobar el presupuesto del 2018, sé que precisamente estas cuentas serán la llave que abrirá todas las cerraduras, sobre todo las que han estado blindadas durante tanto tiempo.

Tras la puerta de la Nochevieja aguardan 22,4 millones de euros, un 6,23% más de los fondos con que hemos contado este año. Por ello el lunes volveré al Ayuntamiento para presidir mi primer pleno de presupuestos como alcaldesa, quizá el momento más determinante en la gestión anual de un consistorio. En nuestras manos está la llave, en clave económica, de la justicia, el equilibrio y el futuro de Almassora.

Me abstendré de calificar estas cuentas porque nada hay más evidente que las cifras: dispondremos de cerca de un millón de euros más para inversiones que en el 2017 (de 695.284,78 a 1.694.090,85 euros), triplicaremos los fondos para ofrecer formación y crear empleo (un 345% más que este año al pasar de 227.000 a 783.388 euros) y no subiremos impuestos. Parece fácil pero no lo es porque no hay llave maestra que reparta a la perfección los ingresos y gastos del dinero del contribuyente. Seguro que este presupuesto tampoco es perfecto, pero estoy muy satisfecha de que las cuentas sean las que más dinero destinen a inversión desde, por lo menos, los últimos siete años. A este capítulo van los fondos que años atrás se gastaban en pagar préstamos.

Mención especial merece este apartado, el de la deuda, que volveremos a reducir tras amortizar los créditos que firmó el anterior equipo de gobierno para asumir, por ejemplo, la sentencia de la avenida Generalitat. De los 7,3 millones de euros que heredamos de su gestión a nuestra llegada en 2015 quedan por pagar 3,2. Cuando termine 2018, esta cifra no alcanzará los 2,8 millones.

Esa es la llave de nuestro gobierno: reducción de la deuda, esfuerzo inversor con el amparo de los fondos Feder y apoyo a los sectores más desfavorecidos. A partir del lunes abrimos la puerta a un tiempo nuevo.

*Alcaldesa de Almassora