El campo está harto. Los precios de la mayoría de los cultivos están por los suelos, las plagas amenazan el futuro de muchas plantaciones, los requisitos fitosanitarios, la competencia de los países terceros... son problemas que acucian a los agricultores de la provincia. Y a todo ello se suman los continuos robos. En plena temporada citrícola son muchos los huertos que ven desaparecer parte de las cosechas, de ahí que la Guardia Civil crease un grupo específico para luchar contra los amigos de lo ajeno. El grupo Roca.

Ahora, en plena temporada de la almendra y el algarrobo, la Unió de Llauradors ha alertado del aumento de robos que se está produciendo durante las últimas semanas en las zonas de la Comunitat Valenciana y de Castellón que podrían estar propiciados por el repunte en los precios. Ante esta situación, la Unió va a trasladar a la Delegación del Gobierno los hechos para que las fuerzas de seguridad del Estado extremen las labores de vigilancia en campos así como con vehículos o almacenes sospechosos de transportar o comerciar con cualquier mercancía que pueda proceder de algún robo.

Tanto las sustracciones de algarroba como de almendra han sido fuentes de conflictos en el pasado en algunos municipios del norte de la provincia. Con lo que, vistos los antecedentes, hay que incidir en las medidas de prevención y control para proteger una agricultura que vive permanentemente amenazada por causas diversas y que es el sustento de muchas familias en las comarcas del interior de Castellón.