Usted puede que piense como el presidente de los empresarios que más vale tarde que nunca, que lo importante es que algún día llegue el AVE a la capital de la Plana. Que la llegada a la estación de Castellón de esta infraestructura vital debería producirse cuando sea y a cualquier precio. Esta ha sido la actitud complaciente que desde hace décadas hemos tenido en nuestra provincia y así nos ha lucido el pelo. Bueno, menos cuando estaba Zapatero como presidente del Gobierno, en que la exigencia era de vida o muerte para nuestra economía. A cara de perro.

Lo cierto es que estamos en el año 2016 y todavía no nos ha llegado la infraestructura de moda que, junto con el aeropuerto, llenará de miles de turistas unos hoteles de los que no disponemos. Y es que lo importante es tener hoteles, aparta-hoteles, bungalós o, al menos campings que llenar. Y ahí es donde todavía no hemos hecho los deberes.

Ahora nos cuentan que el AVE llegará en abril, tal vez será porque esperan que por aquellas fechas se convoquen nuevas elecciones generales si las fuerzas políticas surgidas del 20D no se ponen de acuerdo. Más propaganda.

Mientras tanto la construcción y puesta en marcha del AVE, por el ridículo tercer rail, que comparte vía con los trenes de cercanías, sólo ha traído perjuicios a nuestra economía y a los cientos de usuarios de Rodalies que han visto reducidos y encarecidos los trayectos, sin ninguna compensación… En fin, es lo que hay. H