Los nipones tienen fama de ser personas ordenadas. Una prueba de ello es el éxito que está teniendo el libro de Hideko Yamashita el método Dan-sha-ri. El significado de esta palabra se divide en tres partes: Dan (rechazar cosas innecesarias), sha (deshacerse de lo inútil) y ri (detectar lo insano de lo innecesario).

Este novedoso método japonés sugiere ordenar la vida, entendiendo por la palabra vida todo: pensamientos, ideas, emociones, sentimientos, etc. Todo ello basándose en la idea de que deshacerse de lo inútil, bien sea un pantalón roto, un reloj que no funciona o un recuerdo doloroso, nos conduce a un estado de paz con nosotros mismos.

UNA DE LAS REGLAS sobre el orden es la de la ocupación. Así, nunca se debe llenar un habitáculo mas del 80%, sin importar si es un cajón, un armario, una habitación o nuestra cabeza, para no abarrotarlo de cosas innecesarias. Otra de las reglas es la del reemplazo, que no es otra cosa que seleccionar bien aquellas cosas que de verdad nos hacen feliz, limitándonos a ellas, y reemplazándolas siempre que aparezca una nueva que merezca ese lugar. ¿Quién no tiene un «cajón de sastre» donde dejar lo que al final nos resulta innecesario?

Se trata por tanto de seleccionar y expulsar de nuestra vida objetos y relaciones que no nos aportan nada. Es bien sabido que al ordenar todo aquello material que nos envuelve, por ejemplo los trastos de casa, también ponemos en orden nuestro cerebro y nuestras emociones. Cada cosa en su sitio.

Es por esta razón que cuando dejamos los espacios despejados, nos sentimos mejor con nosotros mismos y dejamos entrar la buena energía en nuestra vida, gozando de mejor salud mental y emocional. H

*Psicólogo clínico

(www.carloshidalgo.es)