Con cuatro años de retraso, la Diputación de Castellón empieza a oír las propuestas de Ciudadanos en cuanto a destinos turísticos y Territorio Inteligente. Pero como mal aprendiz, la institución provincial dirigida por el PP, ha enfocado erróneamente el planteamiento y se ha puesto a diseñar una plataforma para el futuro Territorio Inteligente. Diseñando un modelo que ya existe, perdiendo el tiempo pero también el dinero de los castellonenses. Es como si diseñaran un programa para un ordenador que ya está inventado y que está al alcance de todos. En un mundo global y competitivo no hay nada más absurdo que intentar inventar lo que ya está inventado. Las plataformas de gestión de una Smart City o un territorio inteligente están disponibles en el mercado, en compra o incluso de código gratuito. Valencia ya la tiene, y por supuesto Zaragoza, Sevilla, Barcelona y mil ejemplos más.
Pero Moliner quiere inventar la suya y poner su foto en el disco de instalación. Es un verdadero problema, porque Castellón es prácticamente la única provincia de España que aún no ha presentado ningún proyecto de Destino Turístico Inteligente ni de Territorio Inteligente, minando nuestras oportunidades y nuestro desarrollo económico.
En España se han repartido más de 260 millones de euros, de los cuales no hemos visto ni uno. Proyectos que van desde Lepe o Almendralejo, donde se han dado dos millones de euros, y otras muchas poblaciones que sí han demostrado ser inteligentes y han presentado propuestas ejecutables. Aquí, sin embargo, han intentado inventar un programa de gestión para ejecutar todas esas propuestas.
El problema radica en que esta torpeza de gestión nos está llevando a acumular cinco años de retraso respecto a otras provincias y territorios de España, como por ejemplo Andalucía o la misma provincia de Valencia, que sí han sabido entender las propuestas económicas y la lluvia de millones de los fondos Feder y de Red.es. Algo por lo que hemos preguntado en varias ocasiones desde Ciudadanos, incluso durante una sesión plenaria.
En Cs ya advertimos que la Diputación es la única de toda la Comunitat Valenciana que se quedó sin ayudas de Red.es para digitalizar nuestra provincia y avanzar en las comunicaciones virtuales, mientras la de Alicante sumaba 2.642.593,47 euros y la de Valencia, 5.690.578,00.
El colmo ha sido la última convocatoria, hace apenas cuatro meses, en la que la Diputación de Castellón no presentó ningún proyecto y se dejaron en blanco, sin adjudicar, un total de 14 millones de euros por falta de inteligencia.
Señor Moliner, déjese de inventar programas de gestión y vayamos a realizar proyectos que eviten el problema de la despoblación, que mejoren la atención sanitaria, que mejoren la calidad de vida de nuestros vecinos y que aporten más turismo.
Hagámoslo con proyectos ejecutables y llenos de realismo si queremos revertir la situación actual, en la que la mitad de los pueblos de la provincia de Castellón tienen menos de 500 habitantes. Nuestra provincia no puede perder ni un minuto ni un euro más. Necesitamos inversiones que atraigan nuevas oportunidades en el interior.
*Portavoz de Ciudadanos (Cs) en la Diputación de Castellón
