Uno de los puntos del Acord de Fadrell con una carga ideológica más interesante es, sin duda, la implantación de la gratuidad en el uso del transporte público en menores de 14 años. Esta medida implicará no solo que jóvenes y familias utilicen más el transporte público, sino que propiciará un cambio cultural en lo que respecta al uso del mismo: si los niños se acostumbran a desplazarse a través de transporte público desde pequeños, es más probable que mantengan ese hábito toda su vida.

Los datos dicen que cada vez los jóvenes estamos menos interesados en sacarnos el carné de conducir y desplazarnos con vehículo privado. Esto, unido al creciente sentimiento de preocupación por el medio ambiente y las facilidades que nos ofrece la topografía de Castelló, crean una gran ventana de oportunidades para que desde las administraciones facilitemos y potenciemos el uso del transporte público y medios de transporte más sostenibles.

En esta línea, debemos dar un paso más allá y entender la movilidad no solo como un elemento de ordenación, sino como algo esencial en el desarrollo de la ciudad. De forma paralela, es necesario llevar a cabo esta transformación protegiendo y desarrollando el espacio de los viandantes, especialmente en el centro de la ciudad, conjugando medidas como la creación de aparcamientos disuasorios bien conectados con la red de transporte público.

Trabajaremos por un modelo de movilidad más pacificado. Mejorando el acceso y frecuencias de transporte público, desarrollando la red de carriles bici y creando más espacios peatonales, propiciaremos ese cambio que permita ir hacia un modelo de ciudad más sostenible.

*Concejal de Movilidad Sostenible en el Ayuntamiento de Castelló