Ante la conmemoración hoy del Día Internacional de las Mujeres Rurales, la ONU insiste en que el empoderamiento de ellas es esencial para construir un futuro próspero, equitativo y pacífico en un planeta sano. Representan más de un tercio de la población mundial y el 43% de la mano de obra agrícola, pero las barreras estructurales y sociales continúan limitando su poder.

La Federación de Asociaciones de Mujeres Rurales (FADEMUR) celebró esta efeméride en Córdoba con un encuentro nacional para reivindicar la importancia de la mujer en las zonas rurales y la urgente necesidad de alcanzar más derechos y recursos, así como el reconocimiento de su protagonismo por parte de los distintos gobiernos del país y de la Política Agraria Común (PAC). FADEMUR remarca que la PAC, aún haciendo suyo el objetivo del desarrollo rural europeo y la lucha contra la desigualdad entre ciudades y pueblos, no implementa una perspectiva de género. Para la Federación, «apostar por nosotras es apostar contra la masculinización y el envejecimiento del medio rural que están detrás del despoblamiento». Una cuestión que debería ser «asunto de Estado». Asimismo, han recordado que somos el país más despoblado del sur de Europa. En este desierto demográfico viven casi siete millones de mujeres que ejercen funciones de vital importancia para el mantenimiento de la sociedad rural en el territorio. Trabajan, principalmente, en el sector agroalimentario dedicándose a la agricultura, ganadería y transformación de alimentos, y también a la artesanía, turismo y servicios de proximidad.

En Castellón, sufrimos la misma realidad. Las mujeres abanderan la dinamización rural frente a la constante falta de oportunidades. Luchar contra la desigualdad de género en el entorno rural y el despoblamiento es la hoja de ruta de FADEMUR-País Valencià que preside Regina Campos, con la coordinación castellonense de Ruth Sanz y Sol Sorribes. Campos ha estado en Córdoba junto a una representación autonómica de mujeres emprendedoras. Los datos nacionales aportados marcan el perfil en nuestras comarcas. Las mujeres rurales sufren una alta tasa de desempleo, viéndose obligadas a emprender, liderando el 54% del emprendimiento en los pueblos, o abandonar el mundo rural. Ellas son el motor para garantizar supervivencia y futuro.

*Periodista