La triste imagen que se ha dado al mundo el pasado 1-O en Cataluña ha marcado un antes y un después. No hay palabras para describir lo que hemos visto y oído en las transmisiones televisivas y radiofónicas. Votar a pesar de quién fuere, eso era lo importante para los independentistas. Poco importa lo que los altos estamentos de la nación española hayan dictado respecto al referéndum. El Govern catalán poco menos que ha hecho caso omiso a cualquier prohibición o norma. Indigno ejemplo del nivel político.

La Unión Europea no ha interferido en el tema y las declaraciones hechas por algún alto cargo han estado referidas a que el tema del referéndum de Cataluña era interno de España, pero sin embargo han criticado, algunos políticos de la UE, la actuación policial en defensa de los catalanes que se manifestaban con la bandera nacional española, las familias de los guardias civiles y policía nacional destinados en distintos puntos de Cataluña, etc. ¿Es eso democracia? Más de la mitad de la población catalana no ha votado. ¿Habrá sido por miedo a represalias? Miren, yo ya no sé que pensar pero lo cierto es que las grandes empresas empiezan ya a trasladar sus sedes.

Los derechos civiles son fundamentales, pero dentro de un orden. Otra cosa es la interpretación que se dé a los mismos. Los independentistas se han dejado aprovechar por los grupos extremistas manifestándose con la cruz gamada y alusiones racistas. ¿Buena prueba de civismo?

Por otra parte, los grupos de extrema derecha, homofóbicos, etc., de algunos países centroeuropeos han apoyado el referéndum catalán, por su propio interés.

Por favor, orden. Que la manipulación de unos no sea razón para desbaratar la vida de los demás. Han sido muchos años de esfuerzo.

*Secretaria provincial de Derechos Civiles del PSPV-PSOE Castellón