Querido/a lector/a, decía no hace mucho en este rincón, que para Pedro Sánchez y el nuevo Gobierno no será fácil gobernar. Y es que, una cosa es la necesidad urgente (sobre todo después de tanta crisis, recortes y perdidas de derechos, mala distribución de la riqueza, etc...) de gobernar y aportar soluciones en defensa del bien común y la mayoría social y, otra diferente, la de conseguirlo sin dificultad. En todo caso, repito, no será fácil ni por la realidad ni por la oposición.

Por la realidad, porque un gobierno en coalición, en minoría parlamentaria, con contradicciones, con socios determinantes, con grandes empresas y familias que pagan pocos impuestos y se quedan con gran parte de la riqueza creada, etc..., va a necesitar mucho diálogo, coordinación, superar diferencias… y hasta tener que doblegar alguna voluntad.

Por la oposición, también decía, porque por lo que se ve, no le van a sembrar el camino de flores. Posiblemente porque unos, digo Vox, con su lenguaje cuartelero, su arrogancia altisonante y su vocación de salvar a España de una parte de los españoles, al negar la libertad y la democracia, no son ni de derechas, ni populistas, ni conservadores, ni nada de eso, son simplemente otra cosa. En todo caso, no aconsejable para caminar cogidos del brazo. Al tiempo, aquellos que podríamos catalogar de derecha clásica, el PP y Cs, están abandonado las esencias de esa catadura política y moral, como son la moderación, el reconocimiento del otro, llegar a acuerdos... Circunstancia esta que les esta debilitando política y socialmente y creándoles contradicciones internas.

Querido/a lector/a, lo imposible no existe y Sánchez e Iglesias lo van a intentar. Suerte.

*Analista político