Hace más de un mes que vivimos una situación excepcional que empezó como emergencia sanitaria y que ahora también es económica y social. En mis anteriores artículos, desde que se decretó el estado de alarma, he hablado de la importancia de estar a la altura y de actuar con empatía como ciudadanos y como representantes políticos. Porque si algo tenemos que haber aprendido de anteriores momentos de crisis es que se superan cuando nos cuidamos los unos a los otros.

Los gestos solidarios que estamos viendo en las últimas semanas son un ejemplo. La valentía, la solidaridad y la ayuda desinteresada están aflorando en la que ya es una de las situaciones más difíciles de nuestra historia. Una situación en la que también estamos viendo el valor de los profesionales públicos que están trabajando en primera línea para salvar a los demás.

Es el momento de que todos nos ayudemos de la manera en la que podamos. Y por eso en el Ayuntamiento ya estamos trabajando en la reestructuración del presupuesto municipal para este 2020. El objetivo es adaptarlo a las nuevas necesidades para paliar la situación provocada por el coronavirus. Y lo vamos a hacer desde una visión global y transversal, porque la prioridad es poner todos los esfuerzos en atajar las consecuencias sociales y económicas de esta pandemia.

Vamos a tener que renunciar a proyectos e iniciativas que no se han podido realizar o no se podrán realizar a lo largo del año, por lo que se anularán o reducirán partidas que no sean estrictamente necesarias o que no se puedan desarrollar. Estos recursos los destinaremos a las personas que más lo necesitan, como las familias afectadas, las personas más vulnerables y los autónomos y pymes, que debido al estado de alarma han visto muy reducidos sus ingresos.

La reestructuración estará lista cara a la segunda mitad del año y contará con medidas excepcionales, como la puesta en marcha de acciones que dinamicen los sectores económicos y que nos permitan atender las situaciones de emergencia social que se puedan producir. En definitiva, estamos repensando qué partidas y qué actividades se transformarán en políticas sociales.

Nuestra sensibilidad con la situación actual ya ha hecho posibles medidas concretas, como la posibilidad de aplazar el periodo de pago voluntario de la contribución hasta el 16 de noviembre (se puede hacer la solicitud hasta el 30 de abril), el refuerzo de los Servicios Sociales y de las áreas esenciales para hacer frente al coronavirus: Policía Local, Hogar Sagrada Familia, Brigada Municipal, limpieza viaria, así como la creación de nuevos servicios como el reparto de alimentos a domicilio para personas mayores o dependientes, la distribución a domicilio de productos farmacéuticos del Hospital de la Plana, la atención psicológica por teléfono o la desinfección de la vía pública.

Quiero que sepáis que estamos con cada vallero y vallera y que no vamos a dejar a nadie atrás, porque son tiempos de estar al lado de los demás, como vecinos, como representantes públicos y como personas. Juntos lo superaremos y nos llevaremos un gran aprendizaje como sociedad.

*Alcaldesa de la Vall d’Uixó