La creación del Consejo de Participación Ciudadana de Almassora, en el que trabajo desde que entró en marcha la ordenanza que también regula la transparencia y el acceso a la información, es inminente. En la práctica actuará como una plataforma en la que estarán representados los diferentes sectores de la población, que tendrán su propio foro de debate en los consejos sectoriales. Sus portavoces serán los encargados de trasladar sus propuestas e inquietudes en el órgano principal, el Consejo de Participación Ciudadana.

Además del cumplimiento de la ordenanza, la puesta en marcha de este órgano responde a la necesidad de canalizar de forma más ágil las demandas de nuestros vecinos. No en vano, nos encontramos en un momento decisivo para renovar la confianza en las instituciones. Estoy convencida de que una de las principales herramientas para lograrlo pasa por ampliar los canales para el diálogo entre los ciudadanos y las administraciones, en ocasiones repletos de obstáculos.

La participación ciudadana ya no puede entenderse únicamente como el derecho a acudir a votar cada cuatro años, sino que debe ser continua, como permanentes son las obligaciones que tenemos como vecinos. Así se lo haremos saber también a nuestros pequeños a través de la audiencia pública de niños y niñas, un ejemplo más para debatir y consensuar la Almassora que construimos entre todos. H

*Primera teniente de alcalde de Almassora