Los planes a largo plazo ya son cosa del pasado. Desde que conocimos la pandemia de coronavirus ha cambiado nuestra forma de relacionarnos, de planificar, de vivir. El Ayuntamiento, como adminitración afectada, también se ha visto inmerso en esa nueva normalidad que supone el cumplimiento a rajatabla de protocolos sanitarios y la necesidad de ir modificando las previsiones a medida que se presenta cada caso.
Los análisis de las aguas residuales y los datos que proporciona la Conselleria de Sanidad nos confirman que Almassora sigue teniendo personas infectadas y, por tanto, la obligación de extremar las precauciones para evitar contagios. Es por ello que tomamos tantas decisiones impensables hace unos meses y que causan molestias a familias, deportistas, gente del ámbito cultural, menores... pero la salud prima por encima de todo.
Ahora, en la recuperación de la normalidad, nos toca ir partido a partido. Y por ello octubre será decisivo para incrementar los turnos en la piscina y gimnasio y diseñar la temporada 2021. La nueva situación nos ha llevado a crear bonos mensuales para el próximo año, así como un descuento del 50% para abonados anuales que no soliciten la devolución de la cuota por el cierre temporal de las instalaciones durante el estado de alarma. En caso de que ya la hayan pedido, se puede revocar para que disfruten de la rebaja en la tasa de 2021.
Y en ese camino rodeado de precaución para devolver la actividad a Almassora figura también la reapertura de la Casa de la Cultura con aforo limitado y la vuelta de determinados espectáculos al aire libre para evitar contagios, al igual que las clases de adultos de ocio y tiempo libre o la UNED Sénior verán reducido su aforo.
*Alcaldesa de Almassora
