Durante estos meses de confinamiento, en el marco de la crisis sanitaria y social más importante de nuestra historia reciente, hemos generado como ciudadanía grandes muestras de respeto, emociones, empatía, solidaridad y generosidad. Castelló ha permanecido unida en este encierro prolongado. Hemos compartido los mismos sentimientos, la misma incertidumbre, el miedo, la soledad, la tristeza y el dolor por quienes nos han dejado. Y también hemos compartido cada día, a las 20.00 horas, el orgullo de reconocer el trabajo y los esfuerzos de todo el personal sanitario.

Aplaudimos cada tarde, también, a las personas que trabajan en supermercados, en nuestros mercados, en los comercios de alimentación y en quienes han comenzado a reabrir sus puertas, en el transporte urbano y por carretera, en la plantilla de los servicios de limpieza urbana y recogida de residuos, en la plantilla municipal que se ha entregado a la ayuda de los más vulnerables. Aplaudimos a quienes nos han sostenido la vida diaria durante este periodo con tanta entrega y dignidad.

En el mapa provincial, autonómico y nacional somos una pequeña gran ciudad que ha cumplido con responsabilidad todas y cada una de las normas indicadas. Desde el primer momento, incluso antes, hemos sido conscientes de la gravedad de la situación. Varios sectores comerciales de Castelló decidieron ser prudentes, responsables, y suspendieron sus actividades antes de que se declarara el estado de alarma. Varios colectivos ciudadanos han mostrado, asimismo, su apoyo y la responsabilidad colectiva que nos mueve a toda la ciudadanía de Castelló. El pasado martes fue emocionante escuchar la unanimidad del mundo de la fiesta ante la supresión de nuestras fiestas de Magdalena. Es emocionante, cada día, sentir el aliento de una ciudad comprometida, prudente y responsable.

En este sentido, también quiero sumarme y mostrar mi solidaridad con el sector de la hostelería, los comercios y otros sectores que esperaban el paso a la Fase 1 la pasada semana y no fue posible. Creíamos que estábamos preparados, así lo escuchamos y nos organizamos para que esa carga de ilusión y esperanza fuera una realidad. Pero no sucedió. Ahora sí que es posible y el lunes avanzaremos en este plan de desescalada. Nuestra ciudad cambiará su rutina en esta incierta desescalada. Los paseos por horario van a ser encuentros ciudadanos, siempre con cautela, hacia esta nueva normalidad. Poco a poco vamos a reencontrarnos.

Desde el Ayuntamiento de Castelló ya estamos trabajando en la ‘desescalada’, en esta nueva fase que nos trae más desafíos, si cabe, pero que nos brinda un paso adelante en este encierro. El gobierno municipal ha reordenado todas sus áreas y su disposición económica para centrarse en la lucha contra esta crisis sanitaria y social, para estar junto a la ciudadanía y poder dar respuesta a las necesidades más urgentes, así como la atención y protección de los más vulnerables.

Pero sin la responsabilidad y prudencia de cada una de nosotras y nosotros no será posible asumir este periodo de desescalada como corresponde. Debemos ser muy conscientes de lo que estamos viviendo desde hace meses. No podemos olvidar. Debemos ser responsables y solidarios. No podemos relajarnos ante la covid-19.

*Alcaldesa de Castelló de la Plana