Peajes gratuitos para unos y de pago para otros. Sánchez anunció la liberalización de la AP-7 para el 2020 al mismo tiempo que nos va a freír a peajes en otras autovías. Tras 40 años pagando por el uso de esta vía no queda muy claro cómo se va a materializar la gratuidad de la misma cuando además se plantea establecer pagos por circular por autovías como la A-3, la V-30, o el by-pass.

Lo que está claro que por estas vías no sólo pasan y pasarán valencianos, castellonenses y alicantinos sino muchos españoles, turistas o comerciantes que han contribuido a pagar con creces estas carreteras y lo seguirán haciendo hasta que Sánchez se aclare. Un Sánchez que también está pagando un peaje muy caro por mantenerse en el poder, de momento en la interinidad, mientras le sale gratis a independentistas, nacionalistas y populistas.

El peaje de la resistencia de Sánchez también lo estamos pagando los españoles. Ahora mismo tenemos a un presidente en funciones y de vacaciones para seguir pensando en él y solo en él. Un claro ejemplo es el ultimátum que le da a Iglesias: o se pliega a sus condiciones o habrá elecciones el 10 de noviembre. Sánchez sabe que otras elecciones solamente le benefician a él, que no al PSOE porque lo ha destruido, aún así, en Ferraz han optado por: «dame pan y llámame tonto».

Y mientras Sánchez sigue en Doñana, su Gobierno en funciones sigue sin saber cuál va a ser la ruta y prefiere hablar de peajes ajenos y no de los propios, porque sólo los conoce el jefe y, de momento ni está ni se le espera. Así que seguiremos pagando los de siempre: los ciudadanos.

*Diputada nacional de Cs Castellón