El mecanismo usado en democracia para legitimar la llegada al poder se fundamenta en la voluntad de la mayoría de las personas expresada en las urnas, siempre con el respeto y participación de las minorías. Y que ahora ha sido mejorado por algunos gobiernos, a través siempre de la búsqueda del consenso, como estamos realizando y consiguiendo el gobierno en mayoría absoluta del Partido Popular en la Diputación de Castellón, aprobando por unanimidad la mayoría de acuerdos, más de 250 en esta legislatura. Este es el camino en el que ganamos todos.

En cambio, los partidos minoritarios han puesto de moda vulnerar el derecho de la lista más votada a formar gobierno, y han impuesto en muchas administraciones la formación de gobiernos de coalición postelectoral, llenos de condiciones y reparto de cuotas de poder y recursos públicos. Ejemplos hay muchos, desde Pedro Sánchez en el Gobierno de España (con el 22% de los votos y dos millones y medio de votos menos que el PP), gobiernos autonómicos y ayuntamientos, como en Onda, donde el alcalde del PSOE de la coalición cuatripartita fue votado por 900 vecinos menos que el PP.

Por desgracia, no solo coinciden en la forma de conseguir el poder con pactos ocultos, también coinciden en la forma de actuar: postureo y subida de impuestos. El PSOE de Onda entrega la cultura a Compromís para que nos catalanice, permite que instalen un macrovertedero y una incineradora de animales muertos. Nos sube un 10% los valores catastrales y nos ahoga en los pagos de plusvalías, contribuciones, impuesto de sucesiones, donaciones, transmisiones patrimoniales y renta.

La inmensa mayoría de las personas queremos que la lista más votada sea la que termine gobernando. Ya está demostrado que con gobiernos de minorías perdemos todos.

*Diputado provincial del PP