Almassora ya tiene presupuesto para 2020. Sin subir impuestos y reduciendo la deuda, hemos cerrado unas cuentas que alcanzan los 28,6 millones de euros y que reservan más de 5,2 millones a inversiones. Lejos quedan aquellos 636.000 euros destinados por el Partido Popular a inversiones en 2011, o los 807.000 euros de 2012 o los irrisorios 90.000 euros que destinó a nuevas infraestructuras en 2013. Impuestos también pagábamos por aquel entonces, pero la ciudad no crecía hacia ninguna parte.

Quienes se pasaron la legislatura pasada acusándonos de perder subvenciones son los que ven pasar por delante de ellos los 10 millones de euros que hemos conseguido de fondos Feder de la Unión Europea. De hecho, es gracias a haber logrado estas ayudas europeas que nuestro presupuesto tiene un alcance tan cuantioso como el que aprobamos este lunes -sin su apoyo, claro está-. La excusa que usaron es un informe que avisa de que podríamos incumplir la regla del gasto a final de año. Sorprende que presentaran una enmienda a esas cuentas pidiéndonos que incluyéramos otro proyecto que en nada mejoraría el gasto y mantendría ese posible incumplimiento.

YA DIGO, UNA EXCUSA como la que utilizaron en su día para oponerse a la tramitación de las obras de los colegios Embajador Beltrán y Santa Quitèria a través del plan Edificant. Ahora han visto que los dos proyectos siguen adelante, que los estudios de arquitectura que presentaron diseños a concurso van a formalizar sus ofertas para que se materialicen y ahora tienen que cambiar de estrategia a la fuerza. De hecho, en el pleno del lunes nos avanzaron que, a partir de ahora, sí apoyarán el programa Edificant. Claro, oponerse a dos obras de esta importancia, y más siendo su candidata integrante del equipo directivo de Embajador, tiene difícil venta de cara a la comunidad educativa.

Lamento que tanto PP como Compromís no apoyaran los presupuestos. O lo que es lo mismo, que votaran en contra de 1,5 millones destinados a empleo y de las inversiones previstas en los leds de la playa, Vora Riu, el barrio Corell, la Vila, Boqueras, los colegios, el Falomir… en definitiva, que les falte altura de miras para asumir que no por estar en la oposición está mal todo lo que hace el equipo de gobierno.

*Alcaldesa de Almassora