Cuando el Ayuntamiento de Castelló consiguió la aprobación por parte de Europa de nuestra estrategia de desarrollo urbano sostenible ya dijimos que no nos había tocado la lotería. La subvención de 20,2 millones de euros cofinanciados al 50% no caía del cielo sino que era fruto del trabajo y de la apuesta decidida del Pacte del Grau de conseguir fondos europeos para transformar Castelló. Hace tres años, el camino no había hecho más que comenzar y la aprobación de nuestra estrategia DUSI no era la meta sino la casilla de salida en un viaje apasionante, pero para nada sencillo.

Este Ayuntamiento nunca había conseguido una subvención europea de tal calado ni disponía de una estructura interna acorde a los nuevos retos. Se creó una oficina de planificación alabada por expertos en la materia y de la cual hablan por sí solo los resultados. Objetivamente, su doble objetivo de atraer y gestionar se está cumpliendo y con creces.

LA SUBVENCIÓN ha servido para crear un puente nuevo, renovar la flota de vehículos municipales y mejorar la red de carriles bici de la ciudad; está sirviendo para crear un parque de la Panderola nuevo y convertir el Camí La Plana en un vial agradable; y servirá para tener un nuevo y moderno mercado central y crear un centro de envejecimiento activo. Además, se ha conseguido una nueva subvención de 14,8 millones de euros para renovar el 92% del alumbrado público de la ciudad. Como ven, mientras se gestiona lo conseguido, se aspira a nuevos proyectos. Sin magia (que siempre tiene truco), con trabajo, tenacidad y adaptándonos a las circunstancias.

Digo esto porque los últimos días el antigobierno ha cuestionado las acciones llevadas a cabo por el gobierno y la oficina de planificación económica. No es nuevo, cada vez que han querido meter mano en este tema se han dado de bruces con informes técnicos. Es cierto que queríamos remodelar con fondos europeos el Caminàs, pero por un problema de tramitación administrativa ajena a este Ayuntamiento, hemos preferido asegurar el dinero priorizando la remodelación del Camí la Plana. Eso no quiere decir que nos olvidemos de un proyecto tan importante para nosotros como el del Caminàs, para nada. De hecho ya estamos trabajando en otras vías de financiación. Quiere decir que tenemos la flexibilidad necesaria para no perder un solo euro de aquello concedido.

Y A MUCHOS les puede parecer de perogrullo esta afirmación, pero solo hace falta googlear para ver cómo muchos municipios de todo el estado (València, Cádiz, Teruel o Santiago entre otros) están sufriendo para justificar sus planes Edusi. Castelló es casi una excepción en la gestión de estos fondos y uno de los pocos municipios que no ha suscrito una carta pidiendo una prórroga para justificar las actuaciones. De hecho, ayer mismo se hacía público que el 50% de las obras de los fondos Edusi están acabadas o en marcha cuando aún restan tres años más de margen. Pocas ciudades pueden decir lo mismo. El control y la prueba de Europa, como la del algodón, no engaña. Digan lo que digan los del antigobierno. Mientras otros ladran, nosotros seguimos cabalgando.

*Portavoz del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Castelló