Desde julio de 2016 y hasta el pasado diciembre, los vecinos que hayan acudido a la biblioteca municipal de Almassora habrán tenido la oportunidad de leer prensa separatista en catalán. Es el favor que el PSPV le hace a su socio de Compromís, pagando con el dinero de todos los vecinos un diario autonómico de la comunidad vecina que su colega de despachos decidió comprar hace más de un año y medio.

Y como ya sabrán ustedes, hay que contentar a quien le garantiza a uno la vara de mando. Desde que el PSPV ocupó la alcaldía el pasado junio, la compra se ha seguido manteniendo. Accesible a todos y para todos los ciudadanos que deseen consumir el citado diario autonómico catalán.

Y ustedes se preguntarán, ¿y qué hay de malo? La compra de este periódico la estamos pagando todos. Usted y yo. Nos preguntamos si del mismo modo que el PSPV decide comprar en Cataluña la prensa que se ojea en nuestra biblioteca municipal, por qué no ha decidido cruzar el Maestrazgo y llegar hasta Teruel, donde también hay cabeceras que, por proximidad territorial, podrían resultar interesantes para nuestros lectores.

No sabemos si es la lengua en la que se expresan o si es el mensaje que contienen, pero lo cierto es que en Almassora hay una cabecera catalana que ha estado disponible para los lectores y el Heraldo de Aragón, por ejemplo, todavía no lo hemos visto expuesto en la vitrina de prensa escrita.

Que a Almassora la gobiernan dos partidos que caminan en paralelo no es ninguna novedad para quienes somos vecinos. Y que el PSPV paga con nuestro dinero los deseos independentistas y sectarios de su socio de Compromís, tampoco.

Lo vimos hace más de dos años, cuando Compromís decidió esconder la bandera de España del despacho de la alcaldía. No sabemos qué ocurrió con el PSPV que enmudeció de pronto. Ninguna proclama a favor de la bandera, silencio para pasar de puntillas por un tema que le resultaba demasiado incómodo.

Lo mismo hizo cuando el himno de España dejó de sonar en las procesiones por obra y gracia de Compromís. El PSPV no exigió a su socio una rectificación. Silencio. Porque le iba en ello la alcaldía.

Y es así como hoy pagamos un diario catalán que muchos círculos independentistas han considerado referente. Es evidente cuál es el objetivo de Compromís. Lo evidenciaron en pleno cuando se opusieron a refrendar la Constitución frente a quienes en Cataluña se saltaban la ley. Lo hicieron cuando se negaron a defender el Estado de Derecho, cuando retiraron la bandera, eliminaron el himno y colgaron la cuatribarrada de la fachada del consistorio. Por cierto, todavía estamos esperando a que el PSPV despliegue la bandera española con el mismo ahínco con el que permitió a su socio mostrar la enseña catalana.

Lamentablemente, el PSPV vende sus principios si con ello se garantiza la alcaldía. Es el que permite que Compromís siga ocupando los despachos. El que ha pagado desde hace más de año y medio con nuestro dinero la prensa catalana de su colega. El mismo PSPV es el que alienta en Compromís el deseo de que Almassora forme parte de un territorio inconstitucional llamado Països Catalans.

*Portavoz del PP en Almassora